Probar una fruta madura es sensacional como también ver el árbol que la produce, de hecho, decimos "jamás había probado naranjas tan buenas como las de ese árbol". Así mismo sucede cuando nos encontramos con personas con habilidades excepcionales.
Veamos lo que entendemos por madurez humana. La real academia la entiende como la persona que ha alcanzado su plenitud vital. Otros la definen como el tiempo de haber completado su desarrollo. Por mi parte considero que la madurez en nosotros se puede medir por como actuamos, nos expresamos del otro, por cómo nos perciben los otros y como nos vemos, tal cual como se le nota a una naranja que ya es hora de cosecharla y comerla por su madurez.
Podemos decir que la madurez recorre las diferentes etapas del crecimiento humano, esto es, un bebé está nueve meses en el vientre de la madre y terminada la etapa está llamado a la siguiente porque, aunque quisiera quedarse allí no es posible sin poner en riesgo la vida de ambos. En nuestro ciclo de vida experimentamos diferentes etapas de madurez. Gestación, niñez, infancia, adolescencia, juventud, adultez, vejez y de la vejez a la eternidad, no es posible saltar alguna o permanecer en ella, obligatoriamente pasamos de una a la otra.
Cada etapa del crecimiento tiene rasgos y tiempo indicando. Un joven por más que ame ser joven no puede quedarse más tiempo del dado por la naturaleza por más que lo desee. Si lo hiciera, empezaría su proceso de estancamiento o inmadurez. He observado casos de personas en la vejez actuando como adolescentes. Ahora bien, una persona madura puede tener algunos pensamientos y emociones jóvenes, pero siempre en su nivel de crecimiento correspondiente, edad cronológica, física y mental.
Expertos de la madurez humana como Marian Rojas Estapé y Enrique Rojas Ballesteros ambos psiquiatras dejan claro que madurez no es sinónimo de perfección. Además, ellos exponen algunos rasgos de la madurez como es: Vivir en armonía con uno mismo, aceptar y responsabilizarse de sus errores, tener dominio de sus emociones, aprender de las experiencias, conocer sus límites, ser resistente y resiliente.
Por otro lado, el ser humano es mente, cuerpo y espíritu de modo que para la persona llegar a la armonía y balance en sus diferentes áreas se requiere que todo esté integrado. Como la misma escritura lo dice en efesios 4: 16 “Por Cristo el cuerpo entero se ajusta y se liga bien mediante la unión entre sí de todas las partes; cuando cada parte funciona bien, todo va creciendo y desarrollándose en amor”.
La palabra de Dios ilumina el sendero de la madurez. Hebreos 5: 14 nos dice “el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal” o también cuando Jesús dice en Mateo 7:16 “Por los frutos los conocerán. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos? En este caso las hojas de la higuera se mostraron prominentes más cuando Jesús se acercó no encontró nada, algo así sucedió para Israel en ese tiempo desde la madurez espiritual. Es igual en nuestras vidas.
Jesús estaba en busca de esos primeros frutos que se pudieran comer, pero al no encontrar nada era un indicio de que aquella higuera no iba a producir nada ese año. ¿Qué hallará el Señor cuando busque en nuestras vidas? ¿Hallará frutos o simplemente hojas? Dichoso el hombre que no sigue consejos de los malvados… sino que pone su amor en la ley del señor y en ella medita día y noche, será como un árbol plantado a la orilla de un río que da su fruto a tiempo jamás se marchitan sus hojas, siempre está bien.
La madurez del árbol se conoce por sus frutos y la madurez espiritual también se conoce por sus frutos: amor, gozo, fidelidad, paciencia, mansedumbre, paz, bondad, autocontrol. Cuando el Espíritu Santo dirige nuestras vidas suceden cosas asombrosas. Es el caso de San Dunstan tendremos nuevas herramientas de apoyo en todas las áreas, espiritual, emocional, mental, corporal y relacional. Desde el 18 de febrero: 1. Todos los terceros sábados de cada mes daremos comida para el que lo necesite. 2. Todos los terceros viernes tendremos oración de sanación espiritual y emocional. 3. Abrimos consejería matrimonial para parejas en crisis. 4. Abrimos consejería para depresión, ansiedad, duelos y adicciones. 5. Abrimos clases de finanzas y asesorías para nuevos trabajos. Todo esto será promovido en nuestras plataformas tanto de la Radio (Aliento de Dios Radio) como en nuestras redes sociales. Consulte a nuestros profesionales y encontrará nuevas herramientas para madurar en todas las dimensiones de la vida, de manera especial en la madurez espiritual.
Amén.
